Thursday, June 26, 2014

7 Diferencias entre personas de Alto Rendimiento y los Adictos al Trabajo

En nuestro mundo actual en el cual estamos la búsqueda de dar lo máximo y de obtener lo mejor, ha provocado la existencia de personas que se han convertido en Adictas al Trabajo, a quienes se les conoce comúnmente como Workaholic y por otro lado esa misma búsqueda de la excelencia ha generado una nueva clase de ejecutivos de Alto Rendimiento que se los puede llamar como High Performers.

Vale la pena profundizar las diferencias entre estos dos tipos de seres con los cuales muchos de nosotros convivimos en nuestras jornadas de trabajo.

Aunque desde afuera pueden parecer lo mismo, la diferencia sustancial entre los dos se da por cómo se sienten en su relación con el trabajo.

La persona de alto rendimiento trabaja fuerte de una manera sustentable y saludable lo que hace que se sienta feliz e inspirado con su trabajo

El adicto al trabajo trabaja fuerte de una manera no sustentable ni saludable lo que hace que se sienta infeliz y quemado en su trabajo.

Esta diferente manera de trabajar y por sobre todo sentir y vivir el trabajo genera 7 diferencias las cuales son:

1.- Hacer el trabajo VS Estar ocupado
La persona de Alto Rendimiento tiene como objetivo número uno el hacer negocios, por lo que lo único que le interesa son los resultados. En caso de que no ven la forma de crear valor en ese momento, generan las estrategias que para que esto se produzca con el tiempo.

Por otro lado la meta número uno de los adictos al trabajo, es buscar estar ocupados. Los adictos al trabajo buscan llenar cualquier espacio en el tiempo con trabajo pesado porque se sienten inseguros sin hacer nada. La inseguridad viene de no saber su valor. Ellos consideran que la persona tiene su valor en su organización de acuerdo a lo ocupado que pasan en su jornada laboral.



2.- Conocer cuando es suficiente vs Nunca es suficiente

La persona de alto rendimiento conoce cuando es suficiente; ganar por un punto o por 50 no es lo importante sino, lo que realmente importa es ganar.  Las personas de alto rendimiento se enfocan en las áreas que realmente importan eso se consigue cuando se tiene claro lo que significa el éxito.
Un adicto al trabajo nunca tiene claro cuánto trabajo es suficiente, ya que no sabe qué tan bueno es, no tiene idea de cuánto tiempo o recursos necesita destinar para alcanzar su objetivo. Todo esto pasa porque no tiene idea lo que significa éxito profesional.

3.- 100% a tiempo vs 110% todo el tiempo

Una persona de alto rendimiento sabe cuándo dar el 100% de su capacidad en un tema y no está de acuerdo con el 110% porque eso no es sustentable a través del tiempo.
El adicto al trabajo debido a que no tiene claro cuáles son las prioridades, todo se convierte en necesario en urgente y es por eso que tiene que dar muchas veces más de lo que debe o de lo que tiene ahí es cuando va por el 110%.

4.- Conocer su valor vs permitir que otros determinen el valor

Una persona de alto rendimiento conoce tan bien lo que vale que se permite hacer las cosas con libertad.  Esto se logra cuando se hacen autoevaluaciones periódicas que llevan a promover cambios que logren mejoras

Un adicto al trabajo realiza su trabajo con miedo debido a que no conoce lo que vale y es por eso que deja que el resto de las personas con quienes trabaja den la valía a su trabajo.

5.- Proactivo / Intencional Vs Reactivo / No Intencional

Una persona de alto rendimiento es proactivo frente a su tiempo y trabajo, el diseña su agenda de acuerdo a los temas más importantes y necesarios. No permite que distracciones retrasen su trabajo.

Un adicto al trabajo es reactivo, es una persona que permite que el resto de personas sean las que determinen su agenda y prioridades.  Es de las personas que permiten que las distracciones retrasen su trabajo.

6.- Enfocarse en que se controla vs Que no puedo controlar

Las personas de alto rendimiento se enfoca en sus esfuerzos, solo cada uno sabe cuando llego a su objetivo y si dio lo máximo para lograrlo.  El se juzga a si mismo contra su mejor yo.

Un adicto al trabajo se enfoca en el esfuerzo del resto y es por eso que depende de que el resto para lograr sus objetivos.

7.- Ponerse en primer lugar vs estar en segundo

Una persona de alto rendimiento se pone como lo más importante porque se conoce y sabe de su valía, muchas veces puede parecer egoísta pero es porque él quiere dar lo mejor de sí para su trabajo y lograr sus metas.


Un adicto al trabajo no es lo más importante para sí mismo es por eso que siempre da más de lo que él sabe y tiene y pasa esclavo de eso.

Espero que esto les sirva en caso de que estén cometiendo el error de ser un adicto al trabajo.

Tuesday, June 10, 2014

Las 8 prácticas del ejecutivo eficaz de Peter Drucker


Personalmente Peter Drucker es el autor sobre Management que me inspiró a seguir por el camino de la Gestión Humana, con su pensamiento claro y visionario me brindo muchos motivos para emprender en este proceso de aprendizaje del manejo de la gente dentro de las empresas.

El artículo original “What makes a effective executive” fue publicado por primera vez en Harvard Business Review en junio del 2004, como homenaje al gran pensador del Management, he preparado este documento sobre las 8 prácticas del Ejecutivo eficaz

Todas estas ocho prácticas están basadas en resolver tres dilemas que los tiene todo ejecutivo:

¿Qué Información debo tener antes de actuar?

1. Preguntarme... ¿qué hay que hacer?
·                     La pregunta no es: ‘¿Qué quiero hacer?’.
·                     Listar las prioridades y trabajar sólo en la primera.
·                     Si alguien del equipo está más preparado para esa tarea, se delega y se elige la siguiente de la lista.
·                     Hasta no completar el objetivo, ya dure días, meses o años, no se vuelve a formular la pregunta y se cambia de tarea.

Los ejecutivos eficaces no se dispersan,
Se concentran en una sola tarea.


2. Preguntarme... ¿qué le conviene a la empresa?
·                     La pregunta no es: ‘¿Qué es lo correcto para los dueños de la empresa, los accionistas, los empleados o los ejecutivos?’.
·                     Hacer lo que le conviene a la empresa será por añadidura lo que les conviene a todos ellos.
·                     Esta pregunta es especialmente importante en empresas familiares o controladas por una familia.

Sin asegurar el acierto,
No hacerse esta pregunta garantiza una decisión equivocada.


¿Cómo convierto ese conocimiento en acciones eficaces?

3. Desarrollo Planes de Acción
·                     Definir los resultados deseados y los límites de actuación.
·                     El Plan es una declaración de intenciones, no un compromiso, debe revisarse y adaptarse ante nuevas situaciones.
·                     Incluir mecanismos de control de resultados (con plazos).
·                     El Plan es la base para la gestión del tiempo de un ejecutivo, su bien más valioso y escaso.
Los ejecutivos ejecutan,
Pero antes hay que trazar un Plan.


4. Asumo la responsabilidad de mis decisiones
·                     Antes de tomar una decisión hay que saber quién va a realizar la tarea; el plazo; las personas afectadas que deben entenderlo y aceptarlo; y las no afectadas a las que hay que informar.
·                     Muchas decisiones tomadas sin respetar estos principios derivan en problemas cuyo responsable es el ejecutivo.
·                     Si alguien asciende y le va mal el nuevo trabajo, el responsable no es necesariamente él, sino el ejecutivo que lo nombró.

El ejecutivo perfecto en todo no existe,
Debe delegar las áreas que no domina.


5. Asumo la responsabilidad de comunicar
·                     Hay que compartir los planes con superiores, pares y subordinados, y pedirles opiniones sobre los mismos.
·                     Hay que pedir a todos ellos la información que se precisa para desempeñar la tarea, y perseguirles hasta obtenerla.
·                     Del mismo modo, hay que transmitir lo que se está haciendo, objetivos buscados, estrategias...
La información es lo que mantiene unida a una empresa,
No la propiedad o el mando.


6. Me centro en las oportunidades en lugar de en los problemas
·                     Resolver problemas previene daños; aprovechar las oportunidades produce resultados.
·                     Los cambios, dentro o fuera de la empresa, son oportunidades, no amenazas.
·                     Hay que asignar las mejores personas del equipo a las oportunidades, no a los problemas.
En la lista de prioridades lo primero son las oportunidades
y luego los problemas.


¿Cómo logro la implicación en el proyecto de toda la organización?

7. Conduzco reuniones productivas
·                     Las reuniones (más del 50% del tiempo de un ejecutivo) deben ser sesiones de trabajo y no intercambio de cotilleos.
·                     La clave es definir previamente el tipo de reunión, lo que se va a hacer en la misma, y ceñirse al formato.
·                     Realizar un breve resumen escrito de la reunión, con las decisiones tomadas, responsables de desarrollarlas y plazos.

Una reunión o es productiva
o es una pérdida de tiempo.


8. Pienso y digo ‘nosotros ’en lugar de ‘yo’
·                     A diferencia de la responsabilidad, que se tiene y no se puede compartir ni delegar, la autoridad del ejecutivo emana de la confianza que la organización tiene en él.
·                     Por eso, forma parte de un todo.
·                     El ejecutivo eficaz piensa en las necesidades y oportunidades de la organización antes que en las suyas propias.


Pensar y actuar de verdad como ‘nosotros’ parece simple, pero no lo es.